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En ocasiones un pasatiempo puede convertirse en un trabajo, incluso sin intención de que esto suceda. Por ejemplo, existen personas que realizan manualidades para relajarse o convivir con sus hijos; pero, por alguna razón, terminan creando diferentes productos para venderlos. Asimismo, hay gente que desde pequeña aprendió algún oficio (costura, carpintería, alfarería, etc.) y hoy lo pone en práctica para obtener ingresos.
Llamamos artesanías a este tipo de trabajos elaborados en su mayoría por las manos de una persona (artesano o artesana). Y aunque a simple vista pareciera que estas obras no se mezclan con la tecnología, lo cierto es que esta última puede ayudar a potenciar el mercado de las primeras.
Gracias a Internet ahora es posible hacer transacciones comerciales desde un ordenador o dispositivo móvil, incluyendo la compraventa de artesanías y otros productos. De hecho, Statista señala que 1.92 billones de personas hicieron alguna compra en línea durante el 2019; mientras que, según estima dicho portal, 2.14 billones lo harán en 2021.
Si estás leyendo este artículo, lo más probable es que seas un artesano y estés buscando la forma de incrementar tus ventas en el mundo virtual. De ser así, ¡has llegado al sitio correcto! En este artículo descubrirás 5 estrategias efectivas para vender artesanías por internet.
1. Crea un sitio web para darte a conocer
Antes de comenzar con la estrategia web, recomendamos que veas este video para saber cómo puedes posicionar tu página en internet, ¡adelante video!
Si quieres formar parte del comercio virtual, es importante que tengas un espacio para dar a conocer tu negocio y, por supuesto, tus artesanías. Estamos hablando de crear un sitio web profesional. Este te puede ayudar a llegar a más compradores potenciales, pues según la agencia Small Business Web, 8 de cada 10 personas interactúan con un negocio si éste tiene una página web.
Existen dos formas de crear un sitio en Internet. La primera es mediante lenguaje HTML; es decir, debes tener conocimiento acerca de diseño web y computación (puede que hasta un poco de programación).
Este método es complejo y puede requerir una inversión muy grande de recursos. Si no conoces nada de dicho lenguaje, aprenderlo te puede llevarte varios meses (incluso más de un año). Por si no fuera suficiente, para que tu web diseñada con etiquetas HTML funcione de manera apropiada es probable que necesites unos meses más de trabajo.
También puedes contratar a un diseñador web o una empresa que se dedique a ello. Sin embargo, tú no tendrías la libertad para modificar tu sitio. Imagina que quieres agregar algún producto nuevo a tu web, cambiar una foto, modificar el fondo o simplemente actualizar tus datos; si no tienes conocimientos de lenguaje HTML, deberás llamar a la empresa o diseñador. Eso implica otro gasto.
La otra manera de tener tu sitio web es mediante un sistema de gestión de contenidos (CMS, por sus siglas en inglés). Los CMS son plataformas con las cuales puedes crear y administrar contenido web en solo un par de días, sin necesidad de que tengas habilidades de programación.
Las ventajas de este método sobre el primero son la reducción de costos (incluyendo el tiempo) y la oportunidad de poder actualizar o modificar el sitio web cuando lo desees. Es decir, no tendrás que llamar a otra persona o empresa cuando quieras agregar o quitar contenido. Tú mismo podrás hacerlo en cuestión de minutos sin gastar dinero por esos cambios.
Para poder trabajar con un CMS, necesitas un dominio web propio y un hosting. El primero es la dirección que tendrá tu página, por ejemplo “misartesanias.com”; el segundo consiste en el espacio virtual en el que instalarás tu gestor de contenido. Por lo general, hay proveedores que te ofrecen paquetes que incluyen el dominio, el hosting y el CMS. Por mencionar algunos: GoDaddy, Hostgator, Hostinger, Hostalia, etc.
Y si sientes que tantos términos son confusos, ¡no te preocupes! También puedes crear una página web con Kolau de forma sencilla y gratis. Solo debes elegir el país al que perteneces, registrarte y en cuestión de minutos tendrás listo tu sitio web. Además, podrás editarlo cuando quieras sin necesidad de saber acerca de computación o programación.
Independientemente de qué método utilices para crear tu página web, te damos las siguientes recomendaciones para sacarle más provecho.
Comparte tus artesanías y tu trabajo
Lo primero que te recomendamos es que muestres en tu sitio web el trabajo que realizas. Nos referimos a que publiques imágenes de los productos que vendes, de tu taller o espacio de trabajo (si cuentas con uno) y de ti mismo en pleno proceso de creación. La idea es que los visitantes de tu página puedan conocer a qué te dedicas.
Podrías también subir un poco de tu historia; es decir, cómo empezaste a fabricar tus artesanías o qué te motivó a hacerlo. Con esto, les abrirás tu negocio a las personas y les demostrarás que detrás de las artesanías hay un rostro como el de ellas.
Además, si tienes alguna tienda física u oficina, puedes incluir la dirección y los horarios de atención en tu sitio web. Esto puede serte de mucha ayuda para atraer clientes, pues un estudio de Google señala que el 54% de los usuarios que busca en internet la información de un negocio espera encontrar el horario del mismo. Mientras que un 50% desea encontrar la dirección física de la tienda.
Esos datos tienen mucho sentido si tomas en cuenta que, según dicha investigación, el 50% de los consumidores que buscan información de un negocio local lo hace para visitarlo o comprar en él en las próximas 24 horas. Para agregar esta información puedes tomar como ejemplo la página de Javier Medina, un artesano de Madrid.
Utiliza imágenes que optimicen el tiempo de carga
Un estudio de Adobe señala que el 39% de las personas abandona un sitio web si este demora mucho en cargar su contenido. Por ende, es importante que cuides el tiempo de carga de tu página. Para ello, te recomendamos que no utilices imágenes muy pesadas, pues estas pueden tardar más tiempo en cargar.
Te sugerimos que utilices dos tipos de formato para las imágenes. Si vas a agregar fotografías (es decir, imágenes que tú tomes con alguna cámara), lo ideal es que utilices el formato .jpg. En cambio, si vas a usar imágenes con colores planos (por ejemplo, alguna con el logo de tu empresa, una con texto o que tenga ilustraciones), te sugerimos el formato .png, pues este tipo de imágenes tienen una mejor resolución con dicho formato.
También te recomendamos que tengas Photoshop en tu ordenador, ya que con este editor de imágenes puedes modificar el tamaño y resolución de tus archivos. Incluso, con la función “Guardar para web” que está en la opción “Exportar” del menú “Archivo”, puedes comparar qué formato le queda mejor a tu foto y cuánto tiempo, aproximadamente, demora en cargar con determinada velocidad de internet.
Asimismo, antes de subir una imagen a tu web es preferible que la optimices con alguna herramienta especial en internet. Es decir, hay sitios en los que puedes cargar una fotografía para que esta se comprima. De este modo, se reducirá su peso, pero la imagen mantendrá una buena calidad. Entre las plataformas que te permiten comprimir tus fotos están: TinyPNG, TinyJPEG, Kraken.io, Compressor.io e Image Optimizer.
Recuerda, lo ideal es que las imágenes pesen lo menos posible sin que pierdan su calidad. Así que trata de reducir lo más que puedas el tamaño de tus archivos antes de cargarlos a tu sitio web.
Añade distintos canales de comunicación
De acuerdo con un estudio de KoMarketing, el 44% de las personas abandona un sitio web si no encuentra al menos una manera de comunicarse con la empresa. Asimismo, el 64% de los visitantes desea ver información de contacto cuando visita una página.
Por lo anterior, te recomendamos que incluyas distintos medios para que la gente pueda hablar contigo, especialmente cuando tengan alguna pregunta acerca de tus productos o de tu empresa. Para empezar, comparte tu dirección de correo electrónico. Si tienes algún número de teléfono que puedas atender constantemente por cuestiones de negocios, también agrégalo.
Otra opción es que incluyas un formulario de contacto en tu página web. De esta forma, los clientes pueden ingresar sus datos para que seas tú quien se comunique con ellos. En caso de que utilices esta herramienta, ten en cuenta que el 69% de las personas no llena un formulario si este tiene muchos campos, según KoMarketing. Mientras que QuickSprout indica que tener solo 3 campos incrementa hasta un 50% las probabilidades de que los usuarios dejen sus datos.
2. Crea tu propia tienda virtual
Esta estrategia va muy ligada a la anterior. Si bien tu sitio web te puede ayudar a crecer en internet como empresario, para lograr el éxito necesitas vender tus artesanías. Después de todo, ¿de qué sirve tener tus productos e invertir en una página propia si no vas a obtener ganancias? Para ello, una gran alternativa es tener tu propia tienda online y hay dos formas generales de conseguirlo:
Alquilar una “tienda prefabricada”
Tal como lo lees, puedes adquirir tu tienda mediante una plataforma que ya tiene un diseño base. Es decir, tú solo tienes que personalizar el espacio, agregar fotos, información de tus productos, etc. Algunos de estos sitios son Kolau, Shopify, PrestaShop y Magento.
La principal ventaja de este tipo de tiendas es que en tan solo unos minutos ya estarás listo para vender tus artesanías. Además, las plataformas de esta clase suelen brindar atención especializada a quienes trabajan con ellas.
Sin embargo, esa inmediatez y soporte tienen un costo. Crear tu tienda con estas plataformas puede representar una inversión relativamente alta, ya que debes pagar una cuota mensual por mantener tu negocio andando. Asimismo, cada plataforma cobra una comisión por venta realizada. En otras palabras, por cada artesanía que vendas tendrás que darle un pago a tu proveedor.
Para poder trabajar con este tipo de páginas debes crear una cuenta. Después de eso, solo tienes que editar y configurar la página prediseñada para que se convierta en tu tienda de artesanías. Asimismo, puedes adquirir un dominio web propio o trabajar con uno que te brinden las plataformas.
Si trabajas con ellas, ten en cuenta que, si en algún momento decides dejar el servicio y mudarte a otra plataforma, perderás todo el contenido que hayas creado en ella. Es decir, te tocará empezar desde cero.
Crear una tienda en tu página web
La otra forma de abrir tu tienda virtual es incluirla en tu página web. Para ello, solamente debes crear una sección específica para tus productos. Por ejemplo, la empresa de artesanos Oficio Studio incluyó una sección llamada “Tienda” en su sitio web. Al ingresar en ella, se pueden ver los productos disponibles, cada uno de los cuales tiene su descripción detallada, su precio y una opción para comprar en ese mismo instante.
Los botones de compra los puedes ir agregando con el CMS de tu sitio web, pues la mayoría de ellos incluye herramientas que puedes descargar para mejorar tu tienda virtual. Asimismo, puedes crear botones con PayPal y darles a tus clientes la opción de pagar mediante dicha plataforma. De hecho, un sondeo de SpendMeNot indica que el 87.5% de los compradores en línea utiliza PayPal para pagar.
Para ello solo debes crear tu cuenta en esa plataforma, lo cual no tiene ningún costo. Luego debes enlazarla a alguna cuenta o tarjeta bancaria para poder transferir dinero. Una vez hecho, tienes que crear botones de pago en PayPal y añadirlos en tu CMS. Solo ten presente que si usas dicha plataforma para recibir pagos, te cobrarán una comisión de 5.4% sobre el total de tu venta, más US$0.30.
Las ventajas de incluir tu tienda virtual en tu sitio web es que prácticamente el contenido te pertenecerá por completo. Es decir, si más adelante quieres mudarte a otra plataforma, no tendrás que empezar desde cero. Asimismo, no tendrás que pagar una cuota mensual para mantenerla abierta ni deberás adquirir otro dominio.
Si tienes página web con Kolau, puedes crear tu tienda virtual en cuestión de minutos. Solo debes hacer unos cuantos clics, abrir una cuenta en PayPal y ¡listo! Podrás empezar a vender tus artesanías. Incluso, no tendrás que dedicar tiempo a crear botones.
3. Hazte un espacio en las redes sociales
Otra forma de ganar espacio en internet es mediante el marketing en redes sociales. Según Statista, en 2019 había 2.82 billones de usuarios en estas plataformas en todo el mundo, lo cual equivale a más del 60% de las personas que navegan en internet. En 2021 se espera que la cifra llegue a 3.09 billones.
Además, Global Web Index señala que un 54% de los usuarios utiliza las redes sociales para buscar productos o servicios. Es decir, estas plataformas también pueden ayudar a que tus artesanías lleguen a más gente, solo debes saber cómo aprovecharlas y nosotros te damos algunas sugerencias.
Para empezar, debes saber que existen muchas redes sociales en todo el mundo. Cada una de ellas tiene características específicas que pueden explotarse para beneficio de un negocio. Te recomendamos que, debido al tipo de producto que ofreces, te concentres en tres plataformas: Facebook, Instagram y Pinterest.
Crea una fanpage en Facebook
Lo más probable es que tengas un perfil de Facebook o que la mayoría de tus conocidos posea uno, pues existen 2.50 billones de usuarios mensuales en esta plataforma, según datos del mismo Facebook. Esto la convierte en la red social con más usuarios en todo el mundo, así que puedes buscar clientes potenciales en ella.
Para sacarle provecho a Facebook, lo primero que debes hacer es crear una fanpage o perfil empresarial. Este tipo de cuenta te ayudará mucho más que una individual, pues posee características más útiles para los negocios. Algunas de ellas son:
- Mayor cantidad de seguidores: con tu perfil individual, solo puedes tener 5000 amigos. Es decir, si quieres que tus artesanías sean vistas por miles o incluso millones de personas, una cuenta personal no te sería de mucha ayuda. Sin embargo, con una fanpage el asunto cambia, pues esta no tiene límite de seguidores.
- Más opciones de personalización: una fanpage te da más opciones para personalizar tu perfil. Por ejemplo, puedes agregar pestañas, datos de tu empresa o botones call to action para que tus clientes hagan una actividad específica (como “comprar”, “suscríbete”, “más información”, etc.).
- Programar contenido: para que no debas estar todo el día en Facebook o que tengas que estar pendiente de determinada hora para hacer un post, una fanpage te permite programar lo que publicas. Por ejemplo, si un fin de semana no podrás visitar la red social, puedes dejar todo tu contenido programado desde el viernes para que tu página no se quede sin actividad.
- Crear y compartir publicidad: el algoritmo de Facebook no te permite pagar por publicidad con tu cuenta individual, debido a las políticas de la plataforma. Por ello, para poder promocionarte en esta red social es mejor tener un perfil empresarial. Esto es importante, pues solo en Estados Unidos el 78% de las personas ha descubierto nuevos productos o servicios mediante la publicidad en esta plataforma, según Kleiner Perkins.
- Control estadístico para mejores resultados: a diferencia de un perfil individual, con tu fanpage puedes monitorear el contenido que publicas y la interacción que este tenga. Por ejemplo, puedes saber cuántas personas reaccionaron a una foto que publicaste, en qué hora te contactan más seguidores, quiénes interactúan más con la página, etc. Estos datos te pueden ayudar a mejorar tus estrategias de publicación.
- Sección de reseñas y calificaciones: gracias a tu fanpage, tus seguidores podrán escribir una reseña sobre tus productos y servicios, así como darte una puntuación por ello. Al final, podrán recomendarte o no a la comunidad de Facebook. Esto es de mucha ayuda, ya que el 93% de los compradores online basa su decisión de compra en las reseñas de otros, según un estudio de Podium.
Cuando ya tengas tu fanpage, te recomendamos que publiques imágenes de los productos que ofreces. Pueden ser de tus artesanías más vendidas, de las más nuevas o las que consideres más llamativas. No olvides incluir algún enlace a tu tienda virtual para que tus clientes tengan la opción de comprar.
También comparte algunos videos que muestren tus artesanías. Incluso, te animamos a que aproveches este recurso para enseñarles a tus seguidores un poco del proceso de creación de tus productos. Según Facebook, hay más de 3 billones de vistas de videos por día en dicha red social. Así que, si creas un contenido atractivo, lo más probable es que la comunidad de Facebook note tu presencia.
Un consejo que te damos es que tú mismo crees los videos y los subas directamente a la red social. De acuerdo con un estudio elaborado por Quintly, este tipo de videos tiene un 110% más de interacciones que un video enlazado a otro sitio. Asimismo, te recomendamos que este material no dure mucho tiempo. Ten presente que, según un reporte de Facebook, el 65% de la gente que ve los primeros 3 segundos de un video mira al menos los próximos 10 segundos.
Comparte tus artesanías en Instagram
Esta red social también te puede ayudar para promocionar tus artesanías. Según datos de Statista, Instagram cuenta con 1 billón de usuarios a nivel mundial, lo cual la coloca entre las 6 redes sociales más usadas en el planeta.
Por otra parte, un estudio de Facebook señala que el 83% de los usuarios de Instagram ha descubierto productos o servicios a través de dicha plataforma; mientras que un 81% ha buscado productos conocidos en ella.
Esa misma investigación revela que el 87% de las personas realiza una acción después de ver la información de un producto en Instagram. Entre ellas están: comprar el artículo, visitar la página web del negocio, seguir el perfil de la empresa, contactar al vendedor, recomendarlo con sus amigos, etc.
Como puedes ver, Instagram es una plataforma que puede expandir tu negocio, siempre y cuando sepas cómo hacerlo. Y el primer paso que te aconsejamos es que en esta red social también crees una cuenta para tu empresa. Al igual que en Facebook, este tipo de perfil presenta ventajas sobre uno personal cuando se trata de negocios. Vemos algunas de ellas:
- Información detallada de tu empresa: con una cuenta business puedes colocar información detallada de tu empresa o negocio. Es decir, correo electrónico, página web, teléfono, ubicación física, etc. Esto, a diferencia de un perfil personal, te puede servir para que tus clientes potenciales tengan más de un medio para comunicarse contigo (ya vimos en una estrategia anterior lo importante que es este aspecto).
- Control mediante estadísticas: similar a Facebook, Instagram te permite llevar un control del comportamiento de tus seguidores y del contenido que publicas. Claro, esto solo es posible con una cuenta empresarial.
- Crear publicidad de tus productos: en Instagram también puedes pagar para crear anuncios, ya sea con imágenes o videos. Puedes agregar botones de acción para que la gente visite tu sitio web o te compre un producto en ese mismo instante.
Una vez tengas tu cuenta empresarial, te sugerimos que empieces a compartir tus productos, tanto en video como en fotografías. La agencia Omnicore señala que a diario se comparten más de 100 millones de fotos y videos en Instagram. Asimismo, la compañía Mention indica que los videos generan un 38% más de interacción que las imágenes.
Así que, te sugerimos que muestres poco a poco tus artesanías. Por ejemplo, podrías subir alguna nueva cada cierto tiempo. De este modo, cuando un seguidor visite tu perfil, se topará con todo tu catálogo, el cual podrías complementar con algún video que muestre más detalles de algunos de tus productos.
Independientemente de qué tipo de material subas, te recomendamos que utilices los hashtags. Según Sprout Social, el uso de ellos puede incrementar el alcance de tu publicación en un 12.6%. Según Track Maver, el número ideal es 11 hashtags por publicación.
Asimismo, te aconsejamos que a tus publicaciones, sobre todo cuando vas a publicar un producto con la intención de venderlo, les agregues un enlace a tu tienda virtual o algún canal de contacto (tu correo electrónico, tu fanpage, tu página web, etc.). Sí, vender en Instagram también es posible. La idea es que las personas puedan hacer su compra con más facilidad.
Da a conocer tu trabajo en Pinterest
Esta red social cuenta con 322 millones de usuarios mensuales alrededor del mundo, según datos del mismo Pinterest. La tercera parte de esa cifra utiliza la plataforma para seguir a una empresa o marca de su interés, de acuerdo con Statista.
Y si esos datos te parecen poco, también te compartimos que el 82% de los usuarios de Pinterest ha comprado algún producto con base en el contenido que las empresas comparten en esta red social. Además, el 75% de los pines existentes pertenece a empresas o negocios. Así que también resulta un buen espacio para hallar clientes potenciales.
Por supuesto, lo primero que te recomendamos es crear un perfil empresarial. Este te ayudará a compartir más información sobre tu empresa y te permitirá llevar un control estadístico para mejorar en tus estrategias de publicación. Después de registrarte, personaliza tu cuenta con una foto de perfil y portada que represente a tu empresa. Además, añade los datos de tu negocio para que la gente los pueda ver y te puedan contactar.
Una vez hayas creado tu perfil, puedes empezar a crear tus pines y tableros. Los primeros son el contenido que publicas en Pinterest; mientras que los segundos son categorías en las que organizas cada publicación que haces. Por ejemplo, puedes crear un tablero llamado “Artesanías hechas con madera” e ir guardando en él todas las imágenes o videos que tengan relación con esos productos.
Una característica de Pinterest que te puede ayudar a crecer en tus ventas es la opción de repinear, la cual consiste en compartir y recomendar el contenido de una cuenta. En otras palabras, si a alguien le gusta el contenido que publicas, esa persona puede guardar tu pin y mostrárselo a sus seguidores. De esta forma, tu negocio y tus productos pueden llegar a muchas más personas en esta red social.
Por supuesto, para que haya más posibilidades de que compartan tu contenido, debes aplicar algunas estrategias. Acá te damos algunas sugerencias:
- Cuenta un poco sobre tu empresa: una estrategia en Pinterest es contar un poco más acerca de ti en el ámbito laboral. Por ejemplo, si tienes una empresa registrada de manera formal, puedes crear algunos pines que cuenten un poco acerca de ella: a qué se dedica, cómo o por qué la fundaste, el significado de su nombre, etc. Si no tienes una empresa como tal, puedes compartir tu experiencia en el campo de las artesanías.
- Cuida el tamaño de tus fotos y videos: los pines se organizan en columnas, así que lo más recomendable es que el material que publiques sea vertical. Según Pinterest, la relación de aspecto ideal para tus pines es de 2:3; es decir, 600 x 900 pixeles.
- Publica algunos consejos o tutoriales: de acuerdo con la EAE Business School, las personas aprecian más a las empresas que les ofrecen contenido de valor, como sugerencias o consejos. Por ello, te recomendamos que crees un tablero solo de sugerencias para tus seguidores o uno en el que les muestres cómo hacer alguna manualidad. Pueden ser trabajos sencillos, que no requieran mucho tiempo o inversión.
- Utiliza también los hashtags: tal como ocurre en Instagram, las etiquetas ayudan a que la gente encuentre tu contenido. Por ejemplo, si agregas “#artesano”, es más probable que las personas vean tu contenido cuando busquen ese término. El Centro de Ayuda de Pinterest recomienda:
No usar más de 20 hashtags por pin. Es mejor ser objetivo y usar hashtags que tengan sentido y que sean relevantes.
- Agrega el enlace de tu sitio web: te sugerimos que, cuando publiques algún producto para la venta, agregues un link que redireccione a tu cliente a tu tienda virtual. Así, él podrá hacer su compra en ese mismo instante. Por supuesto, no olvides ser específico con la información del artículo: características, precios, condiciones de envío, etc.
4. Incursiona en los marketplaces
Seguramente más de alguna vez has visitado un centro comercial, esos enormes espacios en los que encuentras diferentes tiendas. O quizá has dado una vuelta por un mercado de pulgas, donde también puedes hallar varios puestos en los que venden artículos de todo tipo (muebles, ropa, juguetes, etc.).
Estos sitios pueden ayudar si quieres vender alguna artesanía. Claro, estamos hablando de un lugar físico, pero… ¿y si te dijéramos que en internet hay espacios similares donde puedes ofrecer tus productos?
Nos referimos a los marketplaces. En términos sencillos, son plataformas en las que puedes vender mercancía con la ayuda de un tercero; es decir, de una empresa. Imagina que un marketplace es como el centro comercial o un mercado de pulgas.
Estas plataformas pueden ser muy útiles cuando estás dando tus primeros pasos en el e-commerce o si, por alguna razón, aún no te animas a crear tu propia tienda virtual. El funcionamiento general de un marketplace es bastante simple. Primero, te registras en la plataforma y personalizas la configuración de tu cuenta. Luego, pones a la venta un producto (agregando imágenes y una descripción del mismo).
Después de ello, debes esperar a que un comprador potencial se interese en tu artículo y te contacte para más información. Una vez hecho, ya solo debes gestionar la venta y, en algunos casos, el envío de la mercancía. Solo ten en cuenta que, por lo general, los marketplaces te cobran una comisión por cada venta que hagas y por el envío del producto.
Estas plataformas han adquirido importancia con el paso de los años. Según un estudio de Forrester Research, el 95% de los consumidores online ha hecho alguna compra en un marketplace y más del 50% ha cambiado su forma de compra debido a estos sitios.
Si vas a utilizar los marketplaces, te damos algunos consejos que te funcionarán para vender más rápido tus artículos:
- Comparte las características de tu producto: es importante que les digas a tus potenciales compradores todos los detalles posibles de tu artesanía: qué es, de qué está hecha, para qué sirve, cuál es su tamaño, etc. Según KPMG, el 61% de las personas que compran por internet prefiere conocer las especificaciones del producto que va a adquirir.
- Utiliza fotos de buena calidad: acompaña tus anuncios de imágenes de la artesanía que vas a vender. Procura que esas fotografías sean propias (no sacadas de internet), con buena resolución y que reflejen un buen ángulo (o varios) de tu artículo. Las estadísticas de Google revelan que un 50% de los compradores en línea se guía por las imágenes del producto antes de hacer una compra.
- Mantén comunicación con tu cliente: de acuerdo con un reporte de Microsoft, el 96% de las personas considera que el servicio al cliente es un factor importante para ser leal a una marca o empresa. Por ello, procura responder cualquier duda de tus compradores; incluso, si puedes, pregúntales si ya recibieron la artesanía y si esta llegó en orden.
- Envía tus artesanías a tiempo: cuando te hayan comprado un producto, intenta enviarlo lo antes posible, empácalo lo mejor que puedas y guarda algún registro de cuándo lo enviaste. Según Get Convey, un 84% de las personas no vuelve a comprarle a una empresa tras una mala experiencia con el envío de los artículos.
Aquí te recomendamos algunos de los marketplaces más conocidos y que te pueden ayudar a crecer en el comercio virtual:
Etsy, el marketplace de los artesanos
Es un marketplace internacional orientado principalmente a la compraventa de artesanías y artículos vintage. Según Statista, en 2019 el número de vendedores activos en la plataforma era de 2.5 millones y había 45.7 millones de compradores activos. Asimismo, el 60% de estos clientes ha hecho más de una compra en Etsy. Es decir, existe una base consolidada de usuarios.
Para registrarte en Etsy solo debes crear una cuenta totalmente gratis. Ahora bien, debes saber que la plataforma te cobrará $0.20 por cada anuncio que publiques. Estos posts tienen una duración de 4 meses. Si después de ese tiempo quieres que tu publicidad siga activa, deberás abonar otros $0.20.
Asimismo, Etsy te cobra una comisión por cada venta que realices, la cual equivale al 5% del valor de tu producto. Por ejemplo, si tu artesanía vale US$100.00, la comisión sería de US$5. Por otra parte, deberás tomar en cuenta el envío, ya que este deberá correr por tu cuenta. Es decir, deberás investigar qué empresa de mensajería te resulta más económica.
Amazon, el mercado online número uno
Es el marketplace más popular a nivel mundial, pues cuenta con 5.7 billones de visitantes al mes, según Web Retailer. Además, es el más confiable para los consumidores, pues de acuerdo con un estudio de Feedvisor, el 89% de los consumidores online prefiere adquirir un producto en Amazon antes que en alguna otra plataforma de e-commerce.
Para registrarte en Amazon solo debes crear una cuenta, la cual es gratis. Sin embargo, una vez te inscribes como vendedor, debes elegir entre dos tipos de suscripción:
- Plan de vendedor individual: no tiene ningún costo mensual, pero Amazon te cobrará una comisión del 15% del precio de venta, además de US$0.99. Por ejemplo, si tu artesanía cuesta US$100, Amazón te cobrará US$15.99 por esa venta; es decir, tú ganarías US$84.01. Este plan está pensado para quienes son vendedores ocasionales, pues permite vender hasta 40 artículos al mes.
- Plan de vendedor pro: a diferencia del anterior, este plan tiene una membresía mensual de US$39.99. Está pensado para los vendedores que tienen catálogos amplios, pues se pueden hacer más de 40 ventas al mes. Además, Amazon solo cobra el 15% de comisión.
Respecto al envío, en Amazon tú mismo puedes gestionarlo o puedes pagarle a la plataforma para que almacene tus productos y se haga cargo de todo lo relacionado con la entrega al cliente.
Por supuesto, esto tiene un costo adicional que depende del tamaño y peso de tus artesanías. En la siguiente tabla puedes ver cuánto cobra Amazon dependiendo de las dimensiones de un producto:
Mientras que en esta otra tabla puedes ver el precio mensual por almacenaje de producto. Es decir, la cantidad que pagarás por cada artículo que tengas en las bodegas de Amazon:
Mercado Libre, el marketplace de Latinoamérica
Si vives en Latinoamérica, Mercado Libre es otro marketplace que te puede ayudar a vender tus artesanías. Esta plataforma de e-commerce se encuentra disponible en 18 países y es la más utilizada en dicha región. El sitio Similar Web calcula que hay más de 151 millones de visitas por mes en Mercado Libre.
Al igual que en los marketplaces ya mencionados, para empezar a vender en esta plataforma solo necesitas registrarte, lo cual no tiene ningún costo. De hecho, tampoco debes pagar una cuota mensual o anual por mantener activa tu cuenta. Ahora bien, hay 3 tipos de publicaciones en Mercado Libre y dependiendo de cuál elijas deberás pagar algunos costos:
- Publicación gratuita: no pagas nada por publicar tu artículo ni por venderlo en la plataforma. Sin embargo, cada anuncio tiene una duración de 60 días, su exposición o alcance es muy bajo y, si vendes productos nuevos (como tus artesanías), solo podrás publicar 5 veces al año.
- Publicación clásica: no pagas por publicar, pero sí por cada venta que realices. El porcentaje de comisión varía por país (en México es del 13%, en Perú del 7%, en Chile del 10%, etc.). Las ventajas de este tipo de publicación es que tu anuncio no tiene fecha de vencimiento y la exposición es mejor que la de una gratuita.
- Publicación premium: es similar que la publicación clásica, con la diferencia de que la comisión es más alta (también varía en cada país). La exposición también aumenta, por lo cual tienes más posibilidades de que los usuarios te encuentren en el buscador de Mercado Libre.
En lo que se refiere al envío, Mercado Libre te da dos opciones: tú te encargas de la logística o puedes enviar tus artesanías con Mercado Envíos. Con esta última opción, la plataforma se hace cargo de entregarle el producto al cliente, pero te hará un cobro extra que variará dependiendo del artículo que vendas. Dicho precio puedes verlo antes de publicar tu anuncio.
5. Ofrece envíos “gratuitos” a tus clientes
Si vendes en internet, lo más lógico es que tengas que enviarles las artesanías a tus clientes. Independientemente de qué plataforma utilices para vender (marketplaces, redes sociales o tu propia tienda virtual), te recomendamos que ofrezcas envío gratuito a las personas.
Un reporte de la National Retail Federation revela que el 65% de la gente se asegura de que un sitio tenga envío gratuito antes de comprar algún producto. Asimismo, el 39% espera que el envío gratuito no demore más de dos días. Mientras que un 70% ha optado en algún momento por ir a una tienda física en lugar de pedir el artículo en línea con tal de no pagar el envío.
Puedes ver con los datos estadísticos que tener la opción de envío gratis puede ser una herramienta que te ayude a vender más en línea.
Ahora bien, si no te convence la idea de pagar para que al cliente le llegue la artesanía, quédate tranquilo. En realidad, no es necesario que tú directamente cubras los costes del envío. ¿De qué estamos hablando? Bueno, puedes incluirlos dentro del precio final de tu artesanía. Por ejemplo, si el precio normal de tu producto es de US$50 y el envío a otra ciudad te sale a US$10, entonces vende tu artículo a US$60.
Por supuesto, para poder aplicar esta estrategia primero necesitas investigar. Si vas a ofrecer el envío gratuito en tu propia tienda virtual, antes de empezar a vender averigua qué servicios de paquetería están disponibles en tu zona, hasta dónde llega su cobertura, cuánto tiempo se tardan en promedio para entregar un paquete y cuánto te puede costar su servicio. De esta forma, podrás tener una idea de cual sería el precio final ideal para tus artesanías.
Si vendes a través de un marketplace, te recomendamos que investigues las políticas de la plataforma, así como las posibles opciones de envío que te ofrece. Como ya mencionamos en la estrategia anterior, cada marketplace tiene sus propias opciones de envío.
¡Ahora es tu turno! Pon en práctica estas estrategias que te hemos compartido y verás cómo tus artesanías llegan poco a poco a todas partes, tanto en tu ciudad como en el mundo. No tengas miedo a incursionar en el e-commerce, pues en una era tan tecnológica se vuelve imprescindible si quieres crecer en el plano de los negocios.
Empieza por crear tu propia página web y tu tienda virtual. Aunque suene como una tarea muy difícil, ahora hay herramientas que te pueden ayudar a crearlas en solo un par de horas o días. Incluso, puedes intentarlo con Kolau sin ningún tipo de costo.
Si aún no te sientes preparado para montar tu tienda, recuerda que existen los marketplaces. Estas plataformas sin duda te darán una mano para vender tus artesanías. Independientemente de qué herramienta uses, recuerda ser claro con la descripción y las fotos de tus artesanías. Y por supuesto, haz lo posible por ofrecerles envío gratuito a tus clientes. Ellos y tu bolsillo te lo agradecerán. ¡Anímate y crea tu propio camino hacia el éxito!