“La tecnología no es nada. Lo importante es que tengas fe en las personas, que sean básicamente buenas e inteligentes y si les das las herramientas, harán cosas maravillosas con ellas”. Pareciera que estas palabras dichas por Steve Jobs, quien fue cofundador de Apple, estuvieran dirigidas especialmente a Mario Barahona.
Junto a un grupo de empresarios, Mario decidió confiar en las capacidades de las nuevas generaciones e inició con un negocio dedicado a la educación y capacitación de carreras en el área tecnológica.
Así nace Cefoprotech, nuestra empresa destacada de la semana dentro del marco del Plan de Digitalización MIPYME en Honduras. Aunque esta empresa está teniendo bastante éxito, lo más importante para sus fundadores no es el factor monetario. Pero quién mejor que Mario para contarnos el porqué de su satisfacción al haber fundado este exitoso proyecto.
PREGUNTA: Es un gusto poder tener esta entrevista con usted, Mario. ¿Nos podría contar a qué se dedica su empresa?
RESPUESTA: Nuestro centro es una especie de academia donde se ofrecen cursos enfocados a la formación tecnológica. Nuestro objetivo es brindar a la ciudadanía un espacio para que aprendan un oficio. Algunos de los programas que nuestro centro tiene habilitados hasta el momento son: Mecánica para motocicletas, formación para electricistas con orientación a la automatización de sistemas eléctricos.
P:¿Cómo decidió que quería brindar educación a través de su emprendimiento?
R: El emprendimiento surgió porque nos percatamos de que no había muchos espacios de formación para estas áreas. Actualmente el país cuenta con espacios públicos como el Instituto Nacional de Formación Profesional, pero hay algunas áreas que no se abordan. Por ejemplo, el área de electricidad residencial.
Entonces, nosotros vimos la opción de crear un centro que pueda ofrecer más ofertas académicas y que se pueda financiar también con el apoyo de empresas privadas. El proyecto se creó entre el año 2013 y 2014, presentando una oferta básica de capacitación.
Por ejemplo, se ofrecían cursos para aprender a reparar celulares o cursos de mecánica automotriz, pero estas ofertas técnicas se fueron adaptando de acuerdo a las necesidades que identificamos en el mercado. También nos enfocamos en el tipo de público que queríamos alcanzar y en los últimos años hemos ido evolucionando para ofrecer una oferta directa.
Entonces, el centro surge con ese objetivo de brindar más opciones a las ciudadanías, sobre todo al público joven. Pero el rango de edad de los alumnos que tenemos es a partir de los 16 hasta los 40 años para que puedan formarse en un oficio.
De hecho, tuvimos un caso de un alumno de 45 o 46 años, al que le abrimos las puertas del centro obviando el tema de la edad. A él le negaron la matrícula en los demás centros, pero tenía el deseo de conseguir una oportunidad. Él quería aprender mecánica para iniciar su propio negocio, así que se inscribió en nuestro centro educativo y hoy por hoy cuenta con su propio taller de mecánica de motocicletas.
P: Ya que ha mencionado el enfoque tecnológico en el ámbito académico, ¿por qué decidió optar por esta área?
R: Porque los socios del centro se especializan en cada una de estas áreas. La mayoría de ellos son personas mayores y por eso tienen bastante experiencia. Por ejemplo, el actual gerente general es ingeniero y por eso la idea del centro giró en torno a esa línea de espacios para capacitación tecnológica.
La idea era crear estos espacios para que se pudieran generar carreras técnicas a nivel de oficio. Todo esto surgió porque nos dimos cuenta de que estas áreas son las que tienen bastante demanda en la actualidad.
P: ¿Cuál es el factor que lo diferencia de las demás empresas a nivel educativo?
R: Nosotros estamos brindando una oferta académica mayormente orientada en la parte tecnológica, porque hemos visto que hay pocos centros enfocados en esta área. Además de tener precios realmente accesibles, nuestro valor agregado es el personal que contratamos como instructores, ya que la mayoría tiene alianzas con empresas privadas directas.
Entonces, más allá de aprender el contenido dentro del programa, los jóvenes también tienen un vínculo con estas empresas en cada una de las áreas. Por ejemplo: en el tema de motocicletas se tiene alianza con una de las principales distribuidoras de la ciudad.
Asimismo, para el curso de oficiales hoteleros se tiene vinculación con hoteles de categoría 3 y 4 estrellas en la ciudad. También en el área de electricidad residencial existe una buena conexión con compañías de construcción y el Instituto de Formación Profesional.
Al finalizar nuestros programas, los estudiantes realizan una práctica profesional en estas empresas para poder obtener el certificado. Así es como llevamos al estudiante a un punto donde puede mostrar un desempeño eficiente en estas empresas.
Entonces, yo creo que ese es nuestro valor agregado. Permitir que los jóvenes aprendan al máximo en la parte teórica y práctica, pero también darles grandes oportunidades de pertenecer a estas empresas. De este modo, les conseguimos prácticas que duran de 3 a 6 meses según el programa que elijan.
P: ¿Qué estrategia de marketing utiliza para atraer a estos estudiantes?
R: Actualmente sí hemos estado probando un poco las redes sociales como Facebook e Instagram, pero la herramienta que más nos ha servido es WhatsApp. A través de esta plataforma hemos conseguido nuevos estudiantes, ya que los alumnos que están matriculados con nosotros nos refieren con sus conocidos.
Establecimos ese canal de comunicación porque sabemos que la publicidad de boca en boca tiene un alto impacto. Pero también creamos nuestra plataforma en Kolau para poder tener presencia en buscadores.
En cuanto a Facebook e Instagram manejamos publicaciones de promoción y contenido de valor para cada una de las áreas. Por ejemplo, en el área de mecánica en motocicletas presentamos contenido que hable sobre las partes de las motocicletas. También hemos informado lo que representa que la motocicleta haga cierto tipo de sonidos.
Prácticamente llevamos a cabo el marketing de contenidos, pero sí estamos un poco limitados de personal para que se dedique directamente a la creación y publicación de contenido. Al final, lo que nos funciona mejor es WhatsApp, porque nos permite guardar una base de datos y así podemos contactar a los clientes posteriormente.
P: Ya que nos ha compartido todos sus logros, nos gustaría saber qué previsión tiene para el futuro de su negocio.
R: Poder ampliar la oferta de cursos y nuestras instalaciones. Actualmente tenemos un taller, pero las clases teóricas se llevan a cabo en un área de coworking. Entonces sí necesitaríamos instalaciones para que el estudiante trabaje en esta área.
También queremos generar mayores alcances. Hoy por hoy estamos enfocados en ofrecer este tipo de formación a nivel corporativo y empresarial, para que las empresas puedan formar a sus empleados.
Aunque estos colaboradores tengan experiencia en ciertas áreas, creemos que es importante que tengan ese respaldo académico, porque es una forma de validar esas competencias. Básicamente ese es el enfoque a la hora de ampliar nuestro mercado, que se amplíe la oferta académica, la infraestructura y las alianzas con el sector privado.
P: ¿Ha pensado en ampliar estas metodologías? Me refiero a que si se pueden ofrecer estos cursos en línea.
R: Por el momento solo tenemos cursos presenciales por esa misma debilidad que existe en cuanto a la instrucción y las plataformas. Sí hemos visto que hay diferentes plataformas, pero nuestro público actual tiene ciertas limitaciones en el uso de la tecnología.
Ellos están más acostumbrados a las clases presenciales que a los espacios virtuales. Entonces, todavía no hemos contemplado implementar esta metodología, pero creemos que sí podría ser una opción.
P: Queremos inspirar a nuestros lectores con un gran consejo. ¿Qué les diría para que se animen a emprender?
R: Primero que si no arriesgan no ganan. Es importante que cualquier idea que se tenga, por muy difícil que se vea en un inicio, se lleve a cabo con mucha persistencia. Pero también es importante rodearse de las personas correctas, porque ellas pueden contribuir a que sus sueños se lleven a cabo.
Se trata de insistir para poder alcanzar tus sueños
Yo les aconsejo que no desistan, porque poco a poco uno va creciendo hasta llegar a un punto en donde nos podemos consolidar. Creo que al tener un emprendimiento se crea una gran responsabilidad, ya que todo depende de nosotros y de nuestro esfuerzo. Pero también es muy satisfactorio.
Lo que me ha dado mayor satisfacción es poder ayudar a los jóvenes a que tengan un espacio educativo. Me gusta ver que cada trabajo y cada paso que se da tiene sus frutos. También me llena de satisfacción ver cómo esos jóvenes que no tienen las mismas oportunidades que otros, llegan a graduarse. Y cuando ya están emprendiendo ellos mismos, también es una satisfacción inmensa.
Mario les ha enseñado cosas valiosas a los jóvenes a través de su academia, pero también nos ha enseñado a nosotros que un emprendimiento exitoso no solo busca vender. También debe aportar algo de valor a los clientes y ese valor es el que mide el éxito de una empresa.
Gracias a su visión por evolucionar en el mercado, Mario ha beneficiado tanto a su empresa como a sus alumnos. Porque ha creado un proyecto donde las verdaderas ganancias son la superación y el desarrollo de las nuevas generaciones.
Cada semana, destacamos una empresa de Honduras, en el marco del Plan de Digitalización MIPYME, cuya trayectoria, logros y experiencia son una inspiración para todos nosotros. Es un honor y un privilegio poder acercar estas grandes historias y aprender de ellas.